En el marco de acciones urgentes del Cabildo de Tenerife tras el incendio ocurrido en 2023, se analizó el estado vegetativo de las masas de pino radiata afectadas por el fuego por grave riesgo de caída de árboles. Desde Agresta se realizó un diagnóstico espacial basado en datos de teledetección (LIDAR y satélite) e información de parcelas de campo para determinar la magnitud del daño relativo a la severidad del fuego en suelo y el arbolado, cuantificar la madera quemada, evaluar el potencial de regeneración del monteverde, así como el riesgo de erosión, como base para la planificación de actuaciones necesarias para la restauración de los ecosistemas afectados.
