Desde el 2015 en AGRESTA S. Coop. venimos aplicando en Soria una fórmula de trabajo-aprovechamiento en montes de Quercus sp. al amparo de la creciente demanda de leña de este género. Esta fórmula consiste en un tratamiento mixto de este tipo de masas, a camino entre trabajos de limpieza del monte y aprovechamiento del mismo.
En masas de carrasca, Quercus ilex subespecie ballota, procedentes de monte bajo de unos 35-40 años de edad (uno de los tipos de masa arbolada más abundante en la provincia de Soria) el método aplicado consiste en un clareo de un 60-70 % de los pies, quitando pies dominados, tumbados, puntisecos o que por distribución espacial compitan con los pies de futuro, intentando no quitar más de un 40 % del AB para evitar el rebrote. El objetivo es ir a un fustal sobre cepa para conseguir en un futuro una regeneración por semilla.
A los pies que se quedan se les realiza una poda de las ramas delgadas hasta una altura de 1,80-2,00 metros, nunca superando el 50 % de la altura total del árbol. Es importante en la poda de este tipo de frondosas no hacer la poda muy pegada al tronco ya que dificultaríamos la cicatrización de las heridas. Otro aspecto a tener en cuenta a la hora de la poda es que el árbol debe quedar equilibrado en su copa por lo que es fundamental elegir bien las ramas a podar y cuales dejar, en este sentido es necesario que el personal que haga los trabajos esté formado en este tipo de labores.
El material procedente del clareo y de la poda se desrama hasta 5 cm en punta delgada para su aprovechamiento como leña y el resto se apila y se saca para su posterior astillado y uso como biocombustible.
Resaltar que estos trabajos son totalmente autosuficientes, financiándose totalmente con la leña que se extrae e incluso dejando alguna renta al propietario de los terrenos, cuando solo hace unos pocos años había que pagar por hacerlos.
Con estos trabajos logramos numerosos objetivos. Por un lado mejorar el vigor y el estado de este tipo de masas tan abundantes en el centro peninsular y por otro, poner en el mercado una materia prima que está en auge, favoreciendo el uso de combustibles de origen renovable, afianzando la propiedad, generando trabajo en el mundo rural y por último, pero sin embargo muy importante, obteniendo ingresos para el propietario.